Revista semanal por
Internet Indio Gris FUSIONA - DIRIGE - ESCRIBE Y CORRESPONDE: MENASSA 2001 NO SABEMOS HABLAR PERO LO HACEMOS
EN VARIOS IDIOMAS INDIO
GRIS ES PRODUCTO INDIO GRIS Nº 78 AÑO II EDITORIAL Ajeno a las
distancias fui recorriendo el mundo, Nunca supe el
nombre de las fiestas del pueblo Ajeno a las
historias del mundo, de sus guerras Nunca pude
pensar que el mundo fuera nuestro, mas el camino
hacia el amor no era el nuestro al que amaba
volar con las alas del tiempo, Aquí estoy en el incalculable espacio del horror. Soy,
en la quinta luna de Saturno, el ojo, Siete mil años de carnes maceradas me dieron la visión. Razón
y verdad son, para mí, Ojo cáustico y apasionado, indico nuevos rumbos: vivir
en un incuestionable vaivén Una
palabra en el espacio, Querida: Yo era y no era un solitario. No me debía a nadie, pero creía deberme a todo el mundo. A Juan, a Pedro, a los que ni siquiera llegaron a tener un nombre para mí. Todos hermosos muchachos, llenos de energía, muertos antes de tiempo. Soy, a veces, esa grandiosa energía liberada. Nadie podrá conmigo, soy un millón de muertos. Soy el himno que la muerte reclama para sí, soy lo negro de lo negro, quiero decir, los brillos de lo negro, las esmeraldas de la muerte. ¿Te das cuenta, querida, cómo ha pasado el tiempo? ¿Te das cuenta cómo quiero cantar y canto apenas? Vamos, querida, ya ha pasado algún tiempo, ya los pequeños sauces han llevado lágrimas al río. Ya los pequeños sauces han crecido, los vientos han crecido, los niños, mis escritos, mi pereza ha crecido. En todos estos años, mi querida, ha crecido la muerte, ha crecido el dolor y yo, quiero decirte, no estoy preparado para tanto dolor. Así que esta vez comenzaremos por el principio. Para empezar, antes de nada modificaremos nuestra manera de vivir. La
vejez en los próximos siglos La
vejez, me imagino,
A ella no la termino de entender y no sé, tampoco, si debo. - Hoy -me dice ella- tal vez, me vendría bien hablar de los celos, porque después... es una cosa rarísima. Es un sentimiento tan real cuando lo vivo y tan irreal cuando lo hablo que... Bueno, que esta diferencia me asusta, por eso, prefiero silenciar, tanto prefiero silenciar que, cuando los celos son o fueron o serán demasiado, me quise ir, me quiero ir, me iré de su lado. Tengo mucho miedo, porque es tan verdad como locura, y es posible que no hable del asunto, porque que sea verdad y locura a la vez, me causa repugnancia. Ayer noche me hubiese cortado la lengua. - Anoche... -balbuceé-. - Sí, anoche tuve una conversación con mi amor, con el más grande de mis amores, y que no le digo mi único amor porque lo tengo a usted, doctor. Intenté hablarle de mis celos y ¿sabe lo que me dijo? - No me vengas con esas tonterías de mujer vulgar, de mujer común. Yo te amo porque otras mujeres me enseñaron a amar, así que déjate de joder. - Continuamos la próxima.
Orgasmos y dolores, es eso lo que ella propone, cuando propone todo: orgasmos y dolores. Cuando le muestro que todo es azul claro, ella me responde que todos morirán. - Ella y yo y los claros y amables cuentos de amor, todo morirá. - ¿Y el perfume de tu cuerpo sobre mi cuerpo? - Sí -responde ella- y el de otras mil mujeres más sobre tu cuerpo, también, morirá. Bésame por última vez, vástago infernal, carne descompuesta para siempre, mortaja vivaz, no podrás escapar de mis vaporosas y, a la vez, tenebrosas carnes finales. - Seré un poeta -le contesto con altivez. - No te servirá de nada, igual morirás. - Escribiré cien mil páginas, no moriré nunca. Se pudrirá mi cuerpo, se pudrirá mi alma, hasta nuestro amor caerá podrido de pasión, pero no moriré.
1 Un grano pequeño detrás de la oreja me recuerda otros investigadores que murieron llenos de piojos o de granos y, a mí, debo decirlo, me espera otro destino. Me dejarán vivir de mi trabajo o, bien, como la francesa me dijo el otro día, que en París conmigo harían el monumento al dios Eros y me llenarían de sedas y de vicios. Todo gratis, dijo la francesa, a cargo del gobierno socialista francés, ¿qué le parece? 2 La gente es un poco imbécil, no pueden utilizar lo ya hecho. El mundo comienza cuando ellos abren los ojos. ¡Qué boludos! 3 Yo no decaeré porque el sexo no cae. Y si mi escritura sigue hacia adelante, se encontrará con un tope: el sexo no cae. 4 Hablando de la satisfacción sexual directa, diremos que su privación se paga con fenómenos que, por su daño funcional y su carácter subjetivo displaciente, hemos de considerar como patológicos. 5 Tengo que dejar de gritar y ser más claro. O bien tengo que dejar de gritar y ser más oscuro. O bien tengo, sencillamente, que dejar de gritar. De cualquier manera nadie entenderá nada hasta el siglo que viene. 6 En el intento de restauración de un movimiento imposible, la vida, la escritura es la única posibilidad de rectificación. 7 Hubo una época donde se podía hablar de fuerzas interiores. Ahora toda la fuerza es la del dinero, es decir, toda energía es exterior al sujeto. 8 En el encuentro azul de la desesperanza deberé saber qué es lo primero que haré sabiendo que la fiesta, en realidad, es un asesinato. Es decir, un paso adelante implica caídos. CARTA DEL DIRECTOR Y por último, señorita, un tiempo donde todo se destruye puede ser, también, un buen momento para cambiar. En vano vagáis por los dominios de la ciencia, nadie aprende sino aquello que le está dado aprender. Es imposible vivir conforme al principio de placer. Lo psíquico es algo tan singularmente único que ninguna comparación puede definir su naturaleza. Después, si quieres, te puedes dar la cabeza contra la pared o arrancarte los huevos, nadie llorará por ti. ¡Oh si pudiera escribir versos sacrílegos contra mí mismo, contra mi propia experiencia de ser! Ahora ellas dos son dos mujeres enamoradas de sí mismas. Pueden destruirlo todo si no se les permite ese amor. Lo primero que se rompe, claro está, es el hombre que ha intervenido en el encuentro. No lo haré más y así me haré un hombre grande. Indio Gris ESTO ES PUBLICIDAD
|