REFLEXIONANDO AL DÍA

- Con el tiempo algo de mí conseguiré para mí. El resto habrá de ser del mundo, que todo se lo debo.

- Tendré que imaginarme grandioso y así tendré dinero para pagar la luz.

- Cuando yo respeto la fuerza y la bondad de otro hombre, ella enseguida piensa que soy débil.

- Ayer llegó el ordenador, estuve un rato con él, me cansé mucho y no entendí su filosofía para nada. Oscilé entre pensar que yo había envejecido o que el ordenador no era tan moderno como decían.

- Todo el mundo viene a contarme lo que ha sufrido o sigue sufriendo con la muerte de mi hijo Pablo (asesinado). Yo los escucho con paciencia y además de mi propio dolor me siento un poco estafado.

- Todo el mundo quiere ser yo y yo soy otro. Esto debe ser el fundamento de toda la confusión actual.

- Me hincha un poco las pelotas la gente que se hacen los artistas. Porque más artista que yo no hay y, sin embargo, hace más de 40 años que vivo de mi trabajo.

- Sé que no podré (o a lo mejor podré) ver morir a todos los asesinos. Pero soy feliz pensando que mis versos sí verán morir a todos los asesinos.

- A mí ya nadie me reclama nada, sino sólo mis versos y ésa es mi condena.

Veo a mis amigos, la gente en general, reclamados por sus mujeres, sus hombres, sus años, sus enfermedades, su falta de recursos; a mí sólo la poesía tiende sobre mí sus diabólicas demandas y yo hago lo que puedo, sin importarme, sin preocuparme si seré el único o algún otro podrá junto conmigo.

Y cuando me pierdo sólo es para encontrarla.

- Tal vez tengan razón mis escritos, tal vez, rechazando algo pueda gozar de algo.

- No lo tengo que hacer muy difícil, lo tengo que hacer posible y ahí andaré por los caminos de la política.

- No la muerte, el paso de los años es lo que niego jugando, haciendo el amor...

- El juego equivale a una amante pobre mantenida como si fuera rica.

- Utilizar el dinero no significa, exactamente, gastarlo.

- Estoy vuelto a nacer como las águilas más valientes y ahora vendrán, como siempre, los más tontos a preguntarme cómo lo hice y esta vez lo confesaré todo.

Tengo apenas 50 años y ya he solucionado lo central de un hombre. Algo así como que cultura y sociedad ya están cubiertos.

Familia y esas cosas.

Trabajo y esas cosas.

Ya está casi todo, ahora falta el hombre y eso es lo que voy a construir.

- Nunca me darán lo que me quitaron, pero también es cierto que yo nunca devolveré lo que ya me comí.

- Vengan a mí, perros hambrientos, que os daré de comer.

Quise abandonar todo cálculo y el cálculo me ha superado.

Nunca conseguí tanta comida, para tantos perros hambrientos.

- Las cosas siempre marchan a su ritmo. A quien lo tolera bien todo para adelante, a quien lo tolera mal todo para atrás.

- ¿Y el sexo Menassa, qué haremos con el sexo?

¿El sexo de quién? Y lo pregunto porque la poesía no tiene sexo y el sexo del psicoanálisis es el sexo del sujeto de la ciencia, un sujeto que nunca probó vivir.

- No tengo que digerir ni bien ni mal, tengo que dejar que el otro se digiera a sí mismo.
 

Hasta la próxima.

Indio Gris
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